Seguramente has visto en muchas ocasiones a padres y madres que siempre se agachan para hablar con sus hijos. A este método se le llama Escucha Activa.
La Escucha Activa es un método de enseñanza que se define como “una forma de comunicación entre los miembros de la familia que va a permitir desarrollar la empatía, a la vez que proteger los vínculos afectivos”.
¿En qué consiste la Escucha Activa?
La primera vez que se utilizó este concepto fue en 1957. El psicólogo Thomas Gordon la incluyó en su libro “Técnicas Eficaces para Padres”. Esta es una forma de escuchar a nuestros hijos y ponernos en su lugar.
Al tratar con niños nos encontramos con la dificultad de que estos no entienden el mundo de los mayores. Y es precisamente esto lo que hace la “Escucha Activa”, un método de enseñanza efectivo.
Para esto es necesario hacer contacto visual y colocarnos a la altura de los ojos del menor. Esto lo ayudará a sentirse cercano a nosotros, generar empatía y transmitirle calma y serenidad.
La importancia de la Escucha Activa
Como padres, no debemos tomarnos el comportamiento de nuestros hijos de manera personal. Tendemos a contestarles y enfrentarnos a ellos sin darnos cuenta de que están luchando contra sus propias emociones.
Pretendemos obtener una obediencia inmediata y conveniente. Esto hace que no lleguemos a analizar lo que realmente sucede con nuestros hijos y no entendamos el motivo de su comportamiento. Si aplicamos esta técnica, probablemente lo sepamos.
Detrás de su comportamiento, existe una emoción y nuestros hijos necesitan que los padres puedan identificarlas.
Si está gritando, llorando o insultando, es probable que esté buscando una solución a su acción. Si lo reprendemos o castigamos, se calmará, pero aprenderá a temer cómo buscar una solución a lo que le ocurre.
Algo que debemos evitar, es confundir esta técnica y convertir a nuestro hijo en un tirano. Debemos poner límites ante todo, pero evitar imponer alguna consecuencia catastrófica. Lo mejor es, explicarles las ventajas y beneficios de estos.
No está mal decir NO. Esto ayudará al niño a sentir frustración y entender sus obligaciones. Si no lo hace, crecerá con una personalidad egocéntrica.
Beneficios de la Escucha Activa
Si se aplica correctamente, el niño tendrá grabada en la cabeza esta idea: Así debe ser tratado por el resto de las personas. Esto le ayudará a protegerse frente a cualquier tipo de acoso, ya que le permitirá identificar que el trato que recibe no es lo que merece, por lo que lo rechazará.
Si un niño está familiarizado con gritos y amenazas, será más propenso a consentir el maltrato. Esto sucede porque no tiene interiorizada la idea de que no debe ser tratado así.
Debemos estar presentes y darles la seguridad que necesitan al momento de tomar sus decisiones. Además, en la edad adulta tendrán una mejor concepción sobre la igualdad.