Por más sorprendente que parezca, cada vez son más las parejas que viven juntas, mantienen una buena relación con problemas mínimos, pero su vida sexual es casi nula.
Robert Epstein, psicólogo y director del Centro Cambridge de Estudios del Comportamiento en Beverly, Massachussetts, ha revelado que aproximadamente un 20% de las parejas en Estados Unidos no tienen intimidad, en este porcentaje se encuentran parejas que tienen menos de un encuentro al mes o menos de diez al año.
Esta es una realidad incluso en nuestro país, aunque no hay estadísticas concretas. En la mayoría de las relaciones que llevan muchos años juntas, el sexo es lo primero que se deja para mañana cuando la lista de quehaceres es larga y extensa. Esto se da porque seguimos con la mentalidad de que la pasión y entusiasmo son cualidades que únicamente son para las parejas recién unidas o que llevan juntos menos de 3 años.
La mayoría de nosotras piensa que la vida es así y que es más importante llevarse bien, compartir gustos, intereses y hobbies, por lo que los encuentros sexuales bajan a segundo o tercer término. Ya sea que continúen así o que pongan de su parte para redescubrirse en la intimidad.
Perder el interés en el sexo en determinado momento es normal en toda relación, sin embargo, no lo es hacerlo sin motivo aparente. Francisca Molero, directora del Instituto Clínico de Sexología de Barcelona, señala que esto tiene como consecuencias problemas fisiológicos tales como inseguridades y ansiedad que van afectando la respuesta sexual y en las mujeres puede provocar falta de libido, anorgasmia y en los hombres eyaculación precoz o disfunción eréctil.
La falta de interés en el sexo no siempre afecta de igual manera a ambos miembros de la pareja, lo normal es que una parte siga deseando mantener relaciones y la otra no, lo que ocasiona frustración, culpabilidad y discusiones. Lo que romperá la relación tarde o temprano.
Estudios recientes señalan que las mujeres son las primeras en perder interés tras años con la misma pareja y que la causa podría ser el aburrimiento. Los hombres por su parte, empiezan a cansarse de ser ellos los que lleven la iniciativa en la intimidad debido al mito que siempre están dispuestos y de que las mujeres requieran más tiempo para “ceder”.
Muchos problemas sexuales o falta de deseo, son ocasionados por como falta de confianza, de comunicación, intereses diferentes, inexistencia de un proyecto de vida en común o ideas contrarias, es decir, cosas que no se manifiestan y se expresan indirectamente en el ámbito de la sexualidad.
Para solucionarlo es importante saber si quieren volver a encontrarse o no, para esto en la mayoría de los casos es recomendable asistir a terapia, para despertar de nueva cuenta el interés por el sexo, lo que ayudará a la hora de ampliar sus habilidades eróticas y sexuales.
También es importante el trabajo en equipo, ya que es importante recuperar la cercanía que había al principio de la relación: salir juntos, pasear, enamorarse de nuevo, lo que desatará el apetito sexual nuevamente.
