Cuando una mujer se encuentra embarazada es muy común que amigos y familiares pregunte ¿cuándo y cómo será el parto? pues a pesar de ser una decisión de la madre y su pareja, las personas de su alrededor siempre quieren opinar.
Sin embargo, y como dice aquella frase popular “cada quien habla como le va en la feria”, es decir, un gran número de mujeres están en contra del parto natural, mientras que un grupo menor, están a favor.
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Lo que muchas mujeres ignoramos es que el parto natural es la forma más recomendable de dar a luz, ya que la recuperación es más rápida y los malestares son menores.
Para que piensen a conciencia en esta opción te hablaremos de los beneficios del parto natural, según el IMSS.
Se corre menor riesgo
En comparación con la cesárea, representa menos riesgos para la madre y el recién nacido, debido a que una serie de hormonas mandan señales al cuerpo para iniciar todo el proceso de expulsión del bebé; es un mecanismo natural para el cual el cuerpo de la mujer está diseñado.
La recuperación es más rápida
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Muchas mujeres recurren a la cesárea por temor al parto natural (o vaginal), pero deben de pensar en que la cesárea requiere de múltiples cuidados en los días posteriores al parto, ya que al ser un procedimiento quirúrgico implica puntos de sutura y una recuperación más lenta.
En cambio con un parto natural se reduce la pérdida de sangre, la recuperación es más rápida y las posibilidades de infección son bajas.
Mayor tiempo con el bebé
Una cesárea requiere un promedio de 40 días de reposo, ya que al tener una herida la madre no puede realizar sus actividades cotidianas de manera inmediata y tiene que esperar hasta su recuperación para poder atender de manera inmediata las necesidades de su hijo, y evitar complicaciones que pudieran poner en riesgo su salud.
En comparación con el parto vaginal, la madre puede estar con su bebé de forma casi inmediata al finalizar el parto, lo que a su vez permite más pronto la formar el vínculo afectivo.
Además los días de hospitalización son menores, pero siempre y cuando el estado de salud de la madre y el bebé lo permitan.
La recomendación de los especialistas
Durante el embarazo es importante que, además de acudir las consultas médicas, se cuide la alimentación, se utilice ropa cómoda y holgada (ropa interior de algodón) se bañe y cambie de ropa diariamente y se evite hábitos nocivos como fumar, beber alcohol o automedicarse.
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Incluso puede -con la ayuda de su doctor- hacer una rutina de ejercicio moderado como caminar 20 o 30 minutos diarios.
De igual modo todas las mujeres que tengan alguna duda sobre el embarazo cuentan en el Seguro Social con módulos PrevenIMSS, ubicados en las unidades de Medicina Familiar, donde pueden recurrir al personal médico capacitado para resolver todas sus dudas.