Lo que no sabías de la Leyenda del hilo rojo

hilo rojo

 

Como bien sabemos, la mitología japonesa está llena de creencias, leyendas, mitos e historias para todos los gustos. Sin embargo, hay un tema por el cual los japoneses sienten verdadera pasión: el amor. La leyenda del hilo rojo es una historia que alrededor del mundo, ha dado de qué hablar. Unos piensan que es falso, otros que es verdad pero ¿cuál es su origen?

Una de las historias cuenta que un anciano que vive en la Luna sale cada noche y busca entre las almas aquellas que están predestinadas a unirse en la tierra, y cuando las encuentra las ata con un hilo rojo en el meñique para que no se pierdan. Esto quiere decir que todo tipo de relaciones importantes estarían predeterminadas, nada es fruto del azar.


La leyenda del hilo rojo.-Foto de pinterest

Pero, ¿por qué en el meñique? Todo tiene que ver con la sangre: la arteria cubital (o ulnar) conecta nuestro corazón con este dedo y, según la leyenda, esa vena (hilo rojo) se extendería por el mundo hasta unirse a la arteria y llegar al corazón de otra persona.

Ahora bien, los japoneses no limitan estas conexiones al amor de pareja como tal, sino que determina todas las relaciones con significado que podríamos tener en nuestras vidas: mejores amigos, alguien en el que causaremos (o nos causará) un impacto.


La historia japonesa que le ha dado la vuelta al mundo.

Otra de las leyendas, que de hecho es la más contada en Japón, habla sobre un emperador que hizo que una bruja lo llevará hasta la que fuera su “hilo rojo”, pero al no estar de acuerdo porque la mujer era una campesina con una bebé en brazos, la tiró haciendo que la pequeña tuviera una cicatriz en la frente.

Cuando llegó la hora de que él se casara, la corte le dijo que debía desposar a la hija de un general muy poderoso. El día de su boda y al ver a su esposa por primera vez, se dio cuenta que tenía una cicatriz en la frente justo como aquella bebé a la que había visto años atrás.

Todo esto tiene que ver con la comprensión del destino y el papel preponderante que juega el amor en este hilo, puesto que los amores destinados son eso, no podemos escapar de la persona que nació para amarnos.

“Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo rojo se puede estirar, contraer o enredar, pero nunca romper”.