Deja de vivir al día, haz un cambio en tu economía -y tu cartera-

un cambio en tu economía

 

Muchos tenemos la mala costumbre de convertir la quincena en nuestra salvación. Vivir al día se ha vuelto nuestra manera de “organizar” nuestro “limitado” sueldo, y se nos hace más fácil echarle la culpa a este hecho que a nuestras malas acciones.

Vivir al día
Deja de vivir al día, haz un cambio en tu economía -y tu cartera-.

Nuestra falta de organización y malos hábitos con respecto al dinero, nos impiden aceptar que con frecuencia gastamos como si no hubiera un mañana y, preferimos justificar nuestros gastos innecesarios con tal de no dejar nuestro “estilo de vida”.

Si estas cansada de vivir así y deseas hacer algo pronto, aquí te diremos lo que puedes dejar de hacer para lograr un cambio en tu vida, pero sobre todo en tu cartera.

1. No lo consideres un estilo de vida: 

Vivir al día es lo más lejano que existe a un estilo de vida, además vivir de esta forma genera mucho estrés y por consiguiente, problemas en la salud que comúnmente empiezan a ser notorios en nuestro rostro (ojeras, acné, manchas, etc.).

2. Empieza a buscarle nuevos destinos a tu dinero:

rentar_casa
Deja de vivir al día, haz un cambio en tu economía -y tu cartera-.

Todo el dinero que ganamos debe tener un destino, por lo que toda esa ropa en tu clóset no apareció por arte de magia.

Sin embargo, si quieres tener un buen futuro será mejor que empieces a destinar tu dinero a cosas más importantes. Algo como una cuenta de ahorro, una casa o un auto (bienes que podrían generarte dinero más adelante) son mejores destinos para invertir tus quincenas.

3. Es momento de hacer ajustes:

Muchas cosas en la vida se tratan de prueba y error, por lo que empezar a hacer ajustes no es mala idea, sobre todo en donde sientes que tienes más áreas de oportunidad y puedas empezar a reducir gastos.

Por último, no olvides pensar qué vas a hacer con los extras que tendrás con esos recortes a ciertas cosas ¿Un consejo? ¡Ahorra!

4. ¿Crédito o débito?:

mujer-joven-con-tarjeta-de-credito
Deja de vivir al día, haz un cambio en tu economía -y tu cartera-.

¡No te compliques! Entre la de crédito y la de débito, opta por la segunda. Piensa en que es dinero que ya tienes y que no te endeudarás con intereses.

Lo ideal es usar la de crédito solo en contadas ocasiones y buscando aprovechar promociones reales.

Lamentablemente siempre tendremos un pretexto para gastar de más porque nos guste o no, somos presas fáciles de las “ofertas” y, vivir al día de vez en cuando no tiene nada de malo. El problema surge cuando nos acostumbramos a hacerlo siempre.

El dinero puede ser tu amigo en vez de tu enemigo, pero para conseguir que esté de tu lado, tienes que poner de tu parte y cambiar ciertos hábitos.

También podría interesarte: Cuatro consejos para mejorar económicamente.