Cuidar de nuestra salud en el trabajo es primordial, ya que pequeñas prácticas que consideramos inofensivas puede provocarnos serios problemas e incluso aumentar las posibilidades de una muerte a temprana edad.
Además estos malos hábitos afectan nuestra productividad y pueden ser la causa de los retrasos a la hora de nuestra salida, pero sobre todo la razón por la que no terminamos con nuestros pendientes y día tras día vamos acumulando más trabajo.
La salud es el elemento principal para poder realizar óptimamente nuestras actividades en el trabajo, por ello aquí te decimos que errores cometemos en la oficina y que debemos dejar de hacer.
Quedarse sentado todo el horario laboral
Son muchos problemas que trae el estar en una misma posición por varias horas, sin embargo, no levantarse del asiento un par minutos cada hora podría generar problemas serios que a largo plazo provocarían menor esperanza de vida.
Lo recomendable es levantarse de dos a cinco minutos cada hora; también realizar durante unos minutos algún trabajo de pie, y realizar alguna rutina de ejercicio después del trabajo, todo eso evitará los riesgos del sedentarismo.
Frotarse los ojos
Comúnmente cuando andamos frente a la computadora y sentimos la vista cansada, acostumbramos a frotarnos los ojos, pero es momento de dejar de hacerlo porque ésto podría favorecer el adelgazamiento y deformidad de la córnea (la parte transparente delantera del ojo).
Además con esta práctica la córnea se puede volver blanda, deformarse y puede aparecer queratocono (causante de visión distorsionada y borrosa, miopía y astigmatismo, entre otras males más difíciles de corregir con gafas).
¿Pero y si me pican los ojos? Se puede realizar un ligero restregón, solo debemos evitar frotar enérgicamente y de forma constante.
No utilizar gotas para los ojos
Este es otro de los errores que cometemos y que seguimos haciendo debido a una falsa creencia, ya que muchos consideramos que las gotas son solo para ojos infectados o personas que usan lentes de contacto, pero nada más alejado de la realidad.
El uso de gotas (o lagrimas artificiales), es una forma de aliviar nuestra vista cansada; éstas lubrican, limpian y dan alivio a nuestros ojos, si pasas demasiado tiempo frente a la computadora, será mejor que empieces a usarlas por lo menos dos veces a los largo de tu jornada laboral, notarás la diferencia al final del día.
No lavarse las manos
La importancia de lavarnos las manos constantemente es por la facilidad con la que las bacterias se adhieren a ellas y que como consecuencia facilitan la infección de enfermedades de todo tipo.
Al lavarse las manos no olvides frotar con jabón durante 15 segundos toda la palma y entre los dedos, sin olvidar uñas y muñecas; enjuaga y seca con una servilleta de papel con la que debes cerrar el grifo (volverlo a tocar con la manos limpias hará que nuevamente se adquieran bacterias que acabas de eliminar).
Tener todo el día el celular en la mano
Esto es antihigiénico y un distractor a la hora de realizar nuestros pendientes, además algunos dispositivos pueden provocar alergia por dermatitis debido a la liberación de metales como el cobre o el níquel según su elaboración.
De igual modo este mal hábito puede generar algún trastorno, estrés, ansiedad e incluso depresión.
Recuerda que estando en el trabajo tu prioridad es concentrarte en realizar tus pendientes para poder terminar con ellos al finalizar la jornada laboral. Y si tienes que estar al pendiente de una llamada o mensaje importante, entonces coloca un tono especial para saber que se trata de ello.
Además si evitas revisar cada cinco minutos tu celular podrás ahorra batería y datos.
Los errores que cometemos en la oficina pueden afectar nuestra salud, sin embargo, si queremos mejorar nuestra salud, debemos iniciar ya, el cambio de hábitos.