El modo de ver a Melania Trump habla muy mal de la sociedad

Hay un tema importantísimo que se centra en Melania Trump. No es sobre su estilo, los mensajes que da en sus presentaciones o sobre su vida como modelo –incluyendo “esos desnudos”-. Más bien, es la forma tan injusta en la que es atacada en redes sociales y por la sociedad en general.

Es indignante y reprobable –al igual que los comentarios del futuro Presidente-, la manera en la que la gente trata a Melania Trump: cazafortunas, stripper, exhibicionista, p**a, oportunista, escaladora social, gata…

Son algunos de los insultos con los que nos hemos encontrado en redes sociales. ¿El motivo? Porque es la esposa de quien será uno de los presidentes más antipáticos de Estados Unidos.

El pasado de Melania como principal ataque

Melania antes de ser esposa del magnate era modelo, y con una carrera exitosa. Y para sorpresa de muchos, en algunos de sus trabajos aparece completamente desnuda.

Igual que otras súper modelos que han posado desnudas (Cara Delevingne, Gisele Bündchen, Kate Moss , Cindy Crawford o Carla Bruni –esposa del ex Primer Ministro de Francia-), ya que en la industria del modelaje no es ninguna novedad.

melania-2

En el transcurso de la campaña de Donald Trump, tanto varios opositores como el precandidato republicano Ted Cruz, utilizaron las fotografías en un intento de desprestigiar al candidato. De hecho se llegaron a publicar anuncios en los que se trataba de convencer a mormones no votar por él.

Sin embargo, no solo a los sectores más conservadores se les debe culpar por esta situación. Varias personas denominadas “liberales” han utilizado la carrera como modelo de Melania –al igual que sus desnudos- para compararla con la “clase” de Michelle Obama.

Digámoslo de esta manera: Trump dio un discurso misógino al decir que a las mujeres se les debe “agarrar el c**o” para seducirlas y quienes quisieron contra atacarlo al publicar las fotos de Melania y de llamarla cazafortunas, p**a u oportunista, hicieron lo mismo.

Toda mujer merece respeto

No se es más mujer por ser “recatada” que por “disfrutar de su sexualidad y su cuerpo”; el “clasificar” a las mujeres partiendo de dicho argumento, de por sí ya es sexismo. Y somos mejores que eso.

Melania Trump no es un objeto, ni una dama de compañía, ni una ex stripper.

melania-3

Es una mujer que, cuando decidió abandonar su carrera de arquitectura para dedicarse al modelaje, nunca pensó que se convertiría en la Primera Dama de los Estados Unidos. Es como decir que Grace Kelly no debió convertirse en Princesa porque era actriz.

Basta de criticas a las “Primeras damas”

Y aunque ahora es Melania el blanco de comentarios, igual Michelle Obama, hace poco fue llamada por una funcionaria “simio en tacones”, y tampoco es la primera vez.

Se le criticó por llevar los brazos descubiertos en eventos oficiales, por su manera de vestir o por involucrarse más en los asuntos de gobierno que otras Primeras Damas.

Esto no significa defender a Donald Trump, o apoyar los ideales que defiende. A fin de cuentas, él es el culpable de toda esa antipatía.

Melania juega un papel aparte, no importa que sea su esposa, ni la futura Primera Dama, simplement no merece pagar los platos rotos. Ni ella, ni Ivanka, ni TIffany.

Se puede ser anti Trump sin necesidad de ofender a las mujeres que son parte de su vida.  “Somos mejores que eso”.