La entrega de los GRAMMYs 2017 tuvo grandes momentos, desde los impresionantes looks en la alfombra roja hasta las presentaciones musicales de Lady Gaga, Katy Perry, Adele, Bruno Mars y la mismísima Beyoncé, quien se robó la noche como ya es costumbre.
La reina B
A pesar de que Beyoncé obtuvo 9 nominaciones, solo se llevó dos premios a casa.
Sin embargo, Queen B (como la llaman sus fans) acaparó la atencion del público y las redes sociales con una magnífica presentación que podríamos interpretar como un tributo a la maternidad.
Para darnos una idea de la emotividad del show, hubo un momento durante este que la cámara enfocó a Jay-Z, quien lloraba mientras contemplaba a su mujer haciendo lo que mejor sabe hacer: dar un espectáculo inolvidable.
Discurso con dedicatoria especial
Beyoncé protagonizó otro momento emotivo en la premiación, y fue cuando Adelesubió a recoger su Grammy a “Mejor Álbum del Año” por “25”.
La cantante británica –Adele-, no estaba segura de que realmente mereciera el premio por lo que al momento de dar su discurso se lo dedico a Beyoncé:
“No puedo aceptar este premio. Lemonade fue monumental, Beyoncé. Ha sido tan monumental, tan bien pensado y con un alma tan hermosa… que nosotros sí lo apreciamos. Todos los artistas te adoramos. Eres nuestra luz”.
Al terminar su discurso de agradecimiento, Adele partió su reconocimiento en dos y le otorgó una de las partes a Beyoncé -sí, algo así como lo que vimos en “Mean Girls-.
El dueto que todos esperaban
Por su parte, Lady Gaga demostró que es probablemente la artista más multifacética que la industria de la música pudo habernos dado.
Ya lo hemos visto en sus shows y presentaciones incluso en los Oscares, sin embargo logró sorprendernos de nuevo.
Esta vez compartiendo el escenario con una de las bandas de rock más icónicas de todos los tiempos: Metallica.
Pese a las dificultades técnicas a las que se enfrentaron -uno de los micrófonos comenzó a fallar al inicio de la canción-, la cantante sacó adelante el show de una manera admirable.
La presentación de “Month in The Flame”, resultó de otro nivel gracias a la interpretación de la cantante.
La política como parte del evento
Como era de esperarse, la política también jugó un papel importante.
En la alfombra roja pudimos ver desfilar a Joy Villa, quién tuvo la terrible idea de llevar un horrrible vestido Pro-Donald Trump. Sin embargo no fue la única ya que el rapero Chance The Rapper, llevó una sudadera con la leyenda “Obama” en la espalda.
Por su parte, Katy Perry simuló incendiar un muro durante su interpretación de “Change to the Rythim” y al final exclamó: No al odio”.
Mientras que presentadores como Jennifer Lopez declararon:
“Vivimos un momento donde las voces de los artistas son más necesarias que nunca. No hay tiempo para la desesperanza, no hay lugar para la autocompasión, no hay necesidad para el silencio ni espacio para el miedo”.