Dormir es una de nuestras necesidades básicas, por lo que es primordial intentar hacerlo de siete a ocho horas diarias, y así poder regenerar todo nuestro cuerpo.
Lamentablemente en la actualidad cada vez es mayor el número de personas que duermen entre cuatro o cinco horas, incluso menos y, no toman en serio que esto puede llegar a ser mortal.
Cuando dejamos de descansar apropiadamente, la salud del cuerpo empieza a tornarse en nuestra contra.
Una de las primeras señales es una mente lenta, en la cual se va perdiendo la capacidad de formar recuerdos hasta ir deteriorándose.