Muchas somos las personas que cargamos con variedad de tarjetas de crédito -o débito-, y un monto pequeño en efectivo, sin embargo, este hábito trae como consecuencia el que gastamos de más.
Además, debido al uso de las tarjetas, le hemos restado valor a nuestro dinero, lo cual nos hace más fácil gastarlo sin pensar en las consecuencias.
Pero el excesivo uso de las tarjetas de crédito, no solo ha perjudicado nuestra visión sobre el dinero, también nos impide darnos cuenta de los gastos innecesarios que realizamos y dificulta nuestro deseo de ahorrar.
Limítate al efectivo
Usar solo efectivo es una forma que los expertos recomiendan como método de ahorro ¿Por qué?…
Sencillo, te limitarás a la cantidad de dinero con la que dispones y así, te ajustarás a un presupuesto.
De este modo te darás cuenta del valor real de tu dinero y esfuerzo; ya no te será tan fácil entregar el efectivo como pasar la tarjeta.
Ponlo en práctica de la siguiente manera:
Al recibir tu quincena, solo retira del cajero el efectivo indispensable para solventar tus gastos; está prohibido usar “salvavidas” (tarjeta de crédito o débito).
Para tus gastos fijos (luz, agua, gas, teléfono, internet) pide a tu banco domiciliarlos, así no se te olvidará pagar nunca y ese dinero tampoco lo tendrás en las manos, a su vez evitarás la tentación de gastarlo en otras cosas.
¿Cómo llevarlo al cabo?
Ponlo en práctica en tres pasos:
1) Haz un presupuesto cuidadoso; anota con detalle cuánto gastas al día o a la semana. Al hacerlo, detectarás gastos “hormiga” que analizándolos podrás sacar de la lista o darles una solución más benéfica.
2) Establece un monto límite para tus gastos; basado en ese presupuesto, retira del cajero exactamente esa cantidad y olvídate de lo restante.
Tip extra: Como estas iniciando puedes tener una pequeña reserva de dinero extra, en caso de que tus cuentas en el presupuesto hayan salido mal.
3) El resto del dinero -así sea mínimo- déjalo en el banco o deposítalo a una cuenta de ahorros. Guarda las tarjetas en un lugar poco visible. Olvídate de ellas y concéntrate en cuidar tu dinero en efectivo, pues es lo “único” que tendrás para sobrevivir en la semana y hasta la quincena.
¡Tómalo en serio!
Es importante procurar usar cada vez menos el fondo de emergencia, e ir repitiendo el paso 1 cada semana, hasta que logres encontrar tu presupuesto perfecto.
Dale el valor real a tu dinero; teniendo esto en mente te volverás más cuidadoso en la forma de usarlo, ya que al no tener “tarjetas” para salvarte, necesitarás forzosamente administrarlo mejor.
Este método es una manera efectiva de ahorrar pues te ayudará a ajustarte a cierta cantidad sin la posibilidad de gastar de más
El uso de efectivo te motivará a conseguir tus objetivos, pues al saber que te encuentras limitado por un presupuesto, tendrás la firme convicción de ahorra para lograr obtener lo que deseas y sin deber nada a bancos o tiendas.