Hay decisiones en la vida que simplemente no puedes tomar a la ligera. Casarte, comprar una casa o hacerte tu primer tatuaje son algunos buenos ejemplos. Si tatuarte es una de las decisiones que has tomado y sientes que no puedes alargarla más, entonces la siguiente información te servirá.
Te diremos lo que debes saber si vas por tu primer tatuaje. También lo que conlleva hacerse un tattoo, para que sepas con mayor conocimiento a lo que te vas a someter.
Esto te ayudará a tomar una mejor decisión, para que luego no te arrepientas o sientas que cometiste el “peor error de tu vida”.
Tu primer tatuaje: Debes estar 100% segura
Un tatuaje es para toda la vida, por eso no debes tomarlo a la ligera. Si te lo harás porque alguien más te lo pide o para “demostrarle” tu amor a alguien ¡es mejor que no lo hagas!
Si decides hacerte tu primer tatuaje tiene que ser por ti y para ti, no debes pensar en si le gustará a los demás o lo que dirán, al final tú lo llevarás de por vida, no ellos.
No tiene que tener un significado
Muchas personas criticarán o querrán que les explique el por qué de tu tatuaje, pero no tienes porque darle explicaciones a nadie.
Lo único que debes tomar en cuenta es tu gusto y elección. Si a ti te hace feliz decorar tu piel con un corazón, una flor o un personaje de caricatura… es lo único que debe importarte y si tiene significado o no, es tu decisión.
Inicia con algo discreto
¡Hacerse un tatuaje duele, quien te diga que no, está mintiendo! Como no conoces tu umbral de dolor lo mejor es iniciar con un tatuaje pequeño y discreto.
Por supuesto no tiene que ser diminuto, pero como recomendación, que no ocupe grandes partes de tu cuerpo. Quizás te duela demasiado que al final quieras dejarlo como este.
Elegir el diseño de tu primer tatuaje
Uno de los puntos más importantes. Si vas a un estudio de tatuajes para escoger algo de su catálogo, es probable que te arrepientas a la larga.
Lo mejor es que dediques tiempo a escoger la ilustración o frase perfecta para ti, y lleves al lugar la referencia impresa. Si lo llevas con el tamaño exacto será aún mejor.
Elige una zona “estratégica”
El sol, es uno de los enemigos de los tatuajes recién hechos, por ello lo más recomendable es hacértelo en un lugar que puedas cubrir de los rayos solares.
Además, si tu trabajo exige cierta formalidad, evita los tatuajes en las manos, cuello, o zonas visibles con facilidad. Pero si esto no te perjudicará, entonces con libertad tatúate donde quieras.
Un dato que te podría servir es que, los lugares donde hay más masa muscular, el dolor es menor, en comparación con zonas de articulaciones, la parte interna de las extremidades, los empeines de los pies y el cuello.
Elección de tatuador
¡No lo tomes a la ligera! Recuerda que estarás poniendo tu piel en manos de un experto o un charlatán. Tómate el tiempo necesario para elegir al mejor posible.
Elije a una persona, la cual ya conozcas su trabajo, por ejemplo muchas veces vemos tatuajes impresionantes y que son lo que quisiéramos, de ahí puedes partir para elegir al tatuador correcto.
De igual modo, puedes ir a algún lugar donde hacen tatuajes y preguntar por la persona que este especializada en el estilo que tú buscas.
Los tatuadores son muy versátiles, pero todos tienen un toque especial en distintos estilos, busca el que vaya contigo para que pueda lograr el resultado deseado o uno mejor.
También es importante que logres entablar una buena relación antes, durante y después del trabajo, ya que de esta forma te sentirás más cómoda.
Un buen artista, antes de comenzar, te orientará y despejará todas tus dudas sobre tu diseño, y aunque él te brinde su opinión, te dejará tomar la decisión final.
Lo barato sale caro
Un buen tatuador te cobrará un precio que puede parecer “excesivo”, sin embargo, un buen trabajo tiene que ser bien remunerado.
Si no tienes dinero o prefieres ir a un lugar donde cobren “barato” podrías arrepentirte; esos lugares podrían no contar con los cuidados, higiene y expertos que ameritas para lograr el tatuaje que tanto has anhelado.
Quizás hacerte un tatuaje sea un poco costoso, pero esta inversión es para toda la vida, y si al final el resultado es el deseado o más del esperado, entonces habrá valido la pena el dinero que pagaste.
Prepárate para la sesión
Probablemente estarás hecha un manojo de nervios, pero es importante que trates de relajarte. Para sentirte mejor ve con alguien de confianza, que sea capaz de distraerte y apoyarte hasta el final.
¡Ojo! Si pensabas que para agarrar valor lo mejor es tomar unos tragos ¡OLVÍDALO!
Sustancias como el alcohol y otras drogas afectan la normal circulación de la sangre en el cuerpo, lo cual puede verse reflejado negativamente en el sangrado mientras te tatúan.
Si escogiste un tatuador profesional, no va a tatuarte ni ebrio ni drogado. Pero por si acaso, ya sabes que no debes hacerlo.
Dale los cuidados que un tatuaje amerita
Todo tatuador profesional va a brindarte una serie de cuidados y recomendaciones que deberás seguir al pie de la letra antes y después de la sesión.
Tu tatuaje no estará listo para presumir cuando salgas del estudio sino semanas después, cuando termine de curarse adecuadamente, así que no desesperes.
Los tatuajes son una decisión que debes pensar a conciencia y decidir por ti mismo, pero también es importante buscar a un profesional que pueda hacerte lo que deseas por más pequeño que sea el tatuaje.
Todas estas recomendaciones ayudarán a que al final tengas la seguridad de haber hecho lo correcto.