¿Tu relación ha alcanzado la madurez?

A lo largo de nuestras vidas, las mujeres experimentamos todas las maneras de relaciones sentimentales: desde el primer amor hasta una relación tormentosa o fugaz y en cada una de estas aprendemos algo que nos sirve para adquirir conocimiento propio, experiencia y alcanzar un grado de madurez.

Madurar sentimentalmente requiere muchas caídas, aunque conseguirlo y encontrar a la persona adecuada lo vale. Lejos de arrepentirnos de todas esas ocasiones en las que triunfó la inmadurez, descubrimos que todo puede marchar de una manera completamente distinta y estable, ya que las relaciones son tan fáciles o difíciles dependiendo de nuestra disposición por mantenerlas.  El hecho que tu relación cumpla la mayoría de estas señales es el mejor indicio de que ha madurado:

Las discusiones no se transforman en peleas: Cuando estamos en una relación madura, entendemos que las discusiones son algo que le sucede a toda pareja. Lo ideal es plantear abiertamente las situaciones que les disgustan y encontrar juntos la forma de resolverlos.

Los celos desaparecen: El sentimiento de incertidumbre, tristeza y el carrusel de emociones que la inseguridad trae consigo no tienen espacio en esta relación, ya que se ha forjado de confianza y comunicación constante.

Experimentan plenitud y estabilidad: La carencia de problemas graves y situaciones incómodas tales como celos, chantajes y  mentiras ocasiona un estado de plenitud que mejora la química e influye en su estado de ánimo y en las actividades que realizan a diario.

Desarrollan sus propias habilidades comunicativas: Esto sucede cuando el entendimiento entre ambos progresa a un nivel superior, ya que llega un momento en el que en complicidad crean un canal de comunicación eficiente que sólo ustedes comprenden. Con esto, notarás que tu pareja se desenvolverá mejor.

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Hacen planes juntos: La estabilidad hace que ambas partes miren hacia el futuro: opinan sobre los planes y los logros que pretenden llevar a cabo juntos y trabajan en ello.

Piensan como pareja y respetan su individualidad: Las decisiones trascendentales se consultan en pareja. Platicando sobre las situaciones que surgen con base en una elección y sus consecuencias. Básicamente, pensar como pareja es entender los deseos y la personalidad de la pareja, para poder aceptar y respetar sus distintos puntos de vista, sus metas y aquellas cosas que no compartimos, pero que pueden hablar, tratar y llegar a un punto en el que ambos estén de acuerdo y respetando su individualidad.

Maduran como personas: No sólo es enfocarse en dejar atrás los sentimientos desagradables, también en las virtudes de ambos para poder crecer y desarrollarse en todos los ámbitos. Debes sentirte segura, tranquila para así poder ser impulsada a convertirte en una persona mejor cada día y viceversa.

Son algo más que un noviazgo: No solo se limitan a las actividades que realizan los novios, ya que la pareja es un concepto mucho más complejo. Todas requerimos hablar, desahogarnos, ser escuchadas y comprendidas. Si tú has logrado realizar esto con tu pareja, significa que han creado un vínculo más íntimo y especial.

Se divierten con responsabilidad: Esto representa divertirse evitando situaciones peligrosas que puedan ponerlos en riesgo de alguna forma, pues ahora ya procuran el bienestar del otro y esta es otra manera de demostrar su amor.

Comprenden todos los aspectos del amor: O la mayoría. El amor no sólo es salir los fines de semana, avisar cuando lleguen y hacer compañía en las fiestas familiares, también se expresa en esos momentos duros que no son agradables ni románticos, pero requieren de una demostración solidaria y comprometida de aliento incondicional.