Conciliar vida familiar trabajando desde casa

 

El mundo laboral es un entorno en constante cambio. Sin embargo, hay periodos en la historia en los que cambios se sienten más intensamente que en otros, quizás por la velocidad a la que se producen o por la magnitud de las alteraciones que provocan.

La irrupción durante las últimas décadas de la tecnología y la digitalización de multitud de tareas y procesos viene produciendo un cambio de paradigma que cada vez hace más palpables sus efectos. La posibilidad de descentralizar el lugar de trabajo ha abierto la puerta a un entorno laboral mucho más flexible que permite a los trabajadores hacerse cargo de sus responsabilidades sin dejar de lado su vida familiar o personal.

Así, la conciliación de la vida familiar a través del teletrabajo es una tendencia que viene sintiéndose con cada vez más fuerza, impulsada especialmente por la cultura corporativa de nuevos jugadores como las start-ups.

Lo cierto es que el teletrabajo no es algo, en sí mismo, novedoso. Numerosos oficios, como el periodismo o el arte, por mencionar solo un par de ejemplos, llevan décadas

Conciliar vida familiar trabajando desde casa

poniendo en práctica esta manera de trabajar. Sin embargo, lo destacable de este momento concreto tiene que ver, precisamente, con la generalización de unos procesos que antes estaban reservados a unos sectores muy concretos.

El éxito de este nuevo enfoque está relacionado con ofrecer a los trabajadores la posibilidad de gestionar su tiempo según más les convenga y ensanchar su libertad de actuación dentro de los procesos y las dinámicas de los proyectos en los que se involucran. Esto, por un lado, libera a los trabajadores de la presión innecesaria que supone tener que adaptarse a unos horarios homogéneos que quizás no se amoldan a las circunstancias particulares de cada individuo. Por otro, reduce los costes relacionados con el espacio de trabajo y las horas improductivas en los que incurre la empresa.

Este tipo de flexibilidad es especialmente útil a la hora de conciliar vida laboral y familiar, pues cualquier tipo de interrupción (un niño enfermo, una visita al pediatra, un día festivo en el colegio, …) no altera la dinámica laboral y simplemente mediante el uso de un servidor VPN, el trabajador puede tener su dispositivo móvil o su portátil conectado directamente a la oficina.

Además, aunque en muchos casos sea necesario un periodo de adaptación que permita a ambas partes a acostumbrarse a las nuevas circunstancias, una vez cubierto este proceso de reajuste, los empleados muestran tasas de productividad más altas y ofrecen trabajos de mayor calidad. Numerosas investigaciones prueba que, por lo general, los empleados que se sienten más a gusto y que se consideran respetados y valorados tienen un rendimiento mayor.

El hecho de ofrecer este tipo de alternativas, en las que se tiene en cuenta no solo las necesidades de la empresa, si no las de todos aquellos que forman parte de la actividad empresarial, está traduciéndose en trabajadores más satisfechos y entornos de trabajo más saludables y eficientes. En el ámbito de la creatividad, por ejemplo, los beneficios son indiscutibles. Es muy difícil crear algo verdaderamente original o valioso sin contar con el espacio necesario para que las ideas se desarrollen.

Conciliar vida familiar trabajando desde casa

Por supuesto, ésta no es una dinámica que puede pretender instaurarse directamente ni en todas las profesiones sin excepción. Habrá determinados oficios y determinadas personas que operen mejor a través de los medios y los procesos tradicionales. La transformación del entorno laboral y la sintonización del mercado laboral con estos nuevos paradigmas llevarán un tiempo y deberán ir ajustándose a las circunstancias concretas de cada sector. Sin embargo, poca duda cabe de que la conciliación de la vida familiar con la vida laboral traerá grandes beneficios a las personas que tengan acceso a puestos que permitan un enfoque más flexible, atrayendo talento y pasión a las entidades que lo hagan posible.

Te recomendamos: Viajar da más felicidad que casarse y tener hijos: estudio