En ocasiones no es suficiente que tu pareja y tú tengan el deseo de formar una familia; después de muchos intentos es normal tener esa sensación de querer tirar la toalla. Si este es tu caso, debes saber que hay tratamientos de fertilidad a tu alcance a los que puedes recurrir.
Lo primero que debes hacer es acudir a tu ginecólogo y realizarte estudios para descartar algún padecimiento grave. Una vez dado este paso, puedes diseñar junto con tu médico un plan de tratamiento que comience con las opciones menos invasivas.
Algunas tratamientos de fertilidad:
Fármacos para la fertilidad:
A estos se recurren en caso de tener un desequilibrio o carencia hormonal, estos pueden lograr que tu sistema reproductivo vuelva a funcionar correctamente. Su principal ventaja es que puedes tomarlos al mismo tiempo que realizas otro tratamiento, como por ejemplo una inseminación artificial.
Inseminación artificial:
Si el esperma de tu pareja simplemente necesita ayuda para encontrarse con el óvulo, este método podría ser una opción viable. Consiste en colocar una dosis concentrada en el útero en el momento justo para aumentar la probabilidad de que quedes embarazada y se puede hacer con o sin medicamentos para la fertilidad.
Cirugía:
Si al darte los resultados, el médico te notifica alguno de estos padecimientos: trompas de falopio obstruidas, endometriosis, fibromas, problemas anatómicos en los órganos reproductivos o quistes ováricos, hay un tipo de cirugía menor que se practica con un tubo fino llamado laparoscopio que funciona por medio de fibra óptica.
El procedimiento puede ayudar a diagnosticar el problema o a despejar el camino para que concibas. No obstante, puede ser requerida una cirugía más compleja: una incisión en el abdomen, aunque en muchos casos no es necesaria y las posibilidades de embarazo pueden ser mayores con otras opciones de tratamiento.
Tecnología reproductiva asistida:
Si el problema es que tu pareja tiene poca cantidad de espermas, las trompas de Falopio están obstruidas o existe algún otro factor que impida la fecundación, podrías recurrir a procedimientos de alta tecnología, en donde los óvulos o embriones y el esperma se manejan fuera del cuerpo.
La fertilización in vitro, es la TRA que se utiliza en la mayoría de las personas con problemas de fertilidad. Algunos tratamientos de FIV utilizan una técnica especial de fertilización llamada la inyección intracitoplásmica de espermas.
Sin embargo, en algunas ocasiones tu edad o función ovárica tal vez requieran que recurras a un donante de óvulos o incluso pensar en acudir a una portadora gestacional o madre sustituta, si existe un problema con tu útero o si quedar embarazada pone en peligro tu salud.
¿Cuál es la inversión?
El tratamiento de fertilidad no es del todo económico. El costo promedio de las técnicas de reproducción asistida como la FIV es de $ 20 mil por cada intento, dependiendo de la clínica o el lugar al que recurras. También varía dependiendo cuántos fármacos necesites, dónde vives y si tu clínica ofrece programas que incluyan descuentos por varios ciclos o intentos.
¿Cuál es la probabilidad de éxito?
Muchas mujeres que tienen problemas para quedar embarazadas reciben como tratamiento el medicamento clomifeno, que se administra vía oral e induce la ovulación. Cerca del 35 por ciento de las mujeres que lo toman quedan embarazadas en el transcurso de este. Aunque el porcentaje de éxito varía con la edad:
46 % para mujeres menores de 34 años.
38 % para mujeres de 35 a 37 años.
29 % para mujeres de 38 a 40 años.
19 % para mujeres de 41 a 42 años.
9 % para mujeres mayores de 43 años.
Aproximadamente, el 22 % de los tratamientos asistidos tienen éxito y las probabilidades aumentan alrededor del 50 % en el caso de utilizar óvulos de donantes. Aunque dejar de consumir tabaco, alcohol y cafeína, así como mejorar la dieta puede ayudar a aumentar tus posibilidades.