Una de las estructuras que forman parte del Patrimonio de la Humanidad, una de las siete maravillas del mundo. Un misterio de lo más interesante.
En plena Península del Yucatán se encuentra una de las construcciones más imponentes de todo el planeta Tierra: la Pirámide de Chichén Itzá. Una estructura milenaria y tan majestuosa que ha pasado a formar parte de las Siete Maravillas del Mundo y que, de hecho, está siendo conservada con mucho mimo, ya que ha sido catalogada como Patrimonio de la Humanidad.
Es enorme, majestuosa y con cierta maestría a la hora de distribuir las formas geométricas que le confieren ese diseño tan enigmático y atractivo. Millones de turistas la visitan al año y, al final, todos se hacen exactamente las mismas preguntas. ¿Cómo y para qué se construyó la pirámide de Chichén Itzá? Con la ayuda de Info Quintana Roo, vamos a poder explicarlo.
Cómo se construyó la pirámide de Chichén Itzá
En el siglo XII d.C., fecha en la que se construyó aproximadamente esta estructura, no se contaba ni por asomo con la maquinaria y materiales que se tienen a día de hoy. Lo cierto es que la construcción del Templo de Kukulcán, otro nombre con el que también se le conoce, es un misterio a día de hoy.
Está repleta de detalles, desde su disposición a la distribución de todos sus elementos. Su base tiene unos 55 metros de ancho y su altura queda en torno a la mitad, sobre los 24 metros. Está hecha en piedra caliza, con forma piramidal y con escaleras de 91 escalones dispuestas a cada uno de sus cuatro lados. Todos ellos, combinados con el superior con el que se entra al templo, suman un total de 365 escalones. En efecto, como los días del año.
A eso hay que añadir que las escalinatas se dividen en 18 secciones que podrían ser un guiño a los 18 meses del calendario de los mayas, y su magistral aprovechamiento de la luz del sol. En los solsticios y equinoccios, 21 y 22 de septiembre y de marzo, respectivamente, se puede ver la forma de una serpiente en el interior de la pirámide, que alcanza los 35 metros de longitud.
Es un cúmulo de peculiaridades y lecciones magistrales de diseño y arquitectura que sorprenden porque, por aquel entonces, ni se tenían los conocimientos, ni los materiales, ni las herramientas, ni las máquinas de la actualidad. Su construcción es todo un misterio, lo que le confiere un aire de lo más fascinante.
¿Por qué se construyó la pirámide de Chichén Itzá?
No hay información clara al respecto, aunque por su diseño, juego de luces y sombras y la propia cultura de quienes la crearon, se dice que la pirámide de Chichén Itzá fue construida para rendir culto al dios Kukulcán. Su forma era la de una serpiente, la misma figura que se aprecia en los días antes mencionados.
Por otra parte, hay quienes dicen que se construyó para rendir culto al sol, de ahí sus 365 escalones, sus 18 secciones y sus 52 tableros. Esta última cifra es la que define el ciclo tolteca al completo. Sea como fuere, para los mayas, esta pirámide era un lugar donde encontrar la paz.