La semana pasada, muchos medios especializados se dedicaron a compartir una noticia que desde el primer momento desató polémica: después de 15 meses de matrimonio, la actriz Amber Heard había solicitado al tribunal de California la anulación de su matrimonio con Johnny Depp debido a diferencias “irreconciliables”.
Las especulaciones respecto a la separación comenzaron a surgir: la diferencia de edades, infidelidad y celos por parte del actor, fueron por las que más apostaban los tabloides alrededor del mundo.
La sorpresa llegó cuando a mitad de la semana el sitio de internet sensacionalista TMZ publicó unas imágenes de la actriz saliendo del tribunal con el rostro completamente golpeado, situación que hizo confirmar el motivo del divorcio: Johnny Depp había golpeado a Amber Heard.
Según los medios, en la demanda de divorcio, Amber solicitaba una orden restrictiva hacia Depp, ya que la había maltratado física y emocionalmente durante los 15 meses de matrimonio. El detonante para Amber fue cuando supestamente, Johnny le arrojó un teléfono celular a la cara, lo que le ocasionó los moretones que vimos en la viral fotografía.
Como era de esperarse, la noticia se viralizó de manera espontánea y por medio de sus redes sociales, diversos sitios comenzaron a difundir las imágenes y los detalles de esta polémica separación.
Algo que resultó increíblemente sorprendente, fueron las reacciones de muchos de los usuarios en redes sociales y es este precisamente el objetivo de este artículo: ¿Por qué el caso de Amber Heard es importante para nosotras las mujeres?
Aunque no lo creas, importa mucho. No precisamente porque estamos hablando del mayor escándalo de uno de los actores más guapos de Hollywood, sino por la opinión que gran parte de las mujeres tiene al respecto.
Hay algo que logran las redes sociales en nuestra sociedad que es muy importante para crear una percepción de nuestro entorno: influenciar. Algunas personas aprovechan estos medios para dar a conocer (y viralizar) su opinión respecto a un tema en concreto y así influir en la manera de percibir las cosas de las demás personas.
Estos mensajes, en la mayoría de los casos los reproducimos sin darnos cuenta, a tal grado de transmitírselos a nuestra familia, hijos, amigos y gran parte de las personas con las que convivimos. Lamentablemente, algunos de estos no son del todo positivos para nosotras ya que al vivir en un país patriarcal y altamente machista como es México, nos ponen en una situación de desventaja respecto a los hombres.
Y es precisamente lo que se demostró al dar un punto de vista respecto al conflicto del cual hablamos al principio, ya que las redes sociales se inundaron con comentarios misóginos que culpaban y demonizaban a la actriz.
OJO: Con esto no estamos dando por sentado el testimonio de la actriz como verdad absoluta. Desgraciadamente, es algo que únicamente saben las partes implicadas en el problema, sin embargo, una imagen puede decir más que mil palabras.
¿Sabías que en México aproximadamente el 47 % de las mujeres ha sufrido violencia doméstica por parte de su pareja? De este porcentaje, únicamente 2 de cada 10 mujeres se atreven a acudir a alguna autoridad o institución por ayuda para comenzar el proceso legal en contra de su maltratador. Estadísticas altamente alarmantes y son similares en la mayoría de los países.
Entre los principales motivos para no demandar o pedir ayuda se encuentran: el miedo a cómo reaccionaran sus parejas al respecto, el “qué dirán” de su familia y personas allegadas y el qué consecuencias tendrán respecto a su entorno y desenvolvimiento en sociedad. Lamentablemente, estas ideas las reproducimos sin darnos cuenta y los diversos comentarios en contra de Amber Heard lo demuestran. A continuación algunos de estos.
- “Aparte de ser muy linda es muy ca***na, buen juego, ¿de cuando acá Johnny Depp estuvo en polémica? Jamás hasta que esta pe**a quiere el dinero de Depp… si ella dice la verdad, porque no hay mas pruebas, una foto así con artimaña…”
- “La muy interesada debería conformarse con la fama que ganó al casarse con Depp.”
- “Esa lo que busca es el billete que puede sacarle a Johnny Depp, usurera.”
- “En estos casos media el dinero, hay mujeres que enganchan un hombre con dinero para que las mantenga, puede ser que él ya no quería estar con ella y ella quiso manipularlo con este tipo de acusaciones para sacar provecho,”
- “Amber es de las mujeres que provocan que las agredan para hacerse la victima…”
- “Cuanta caza fortunas hay., esta quiere buena tajada. No hizo contrato prematrimonial y ahora tiene que hacer algo para recibir parte de su dinero. Y si él le tiró el móvil seguro se lo merecía y le dijo que era viejo y asqueroso, pues que le den. Qué asco de mujer.”
- “Yo creo que ella es una arpía que solo le interesa la jugosa fortuna de ‘papi’ Johnny Depp.”
En el feminismo hay un término denominado sororidad que hace énfasis en la solidaridad entre mujeres en la sociedad. Es decir, apoyarnos unas a las otras en lugar de estarnos juzgándonos y señalándonos entre nosotras. Hace un par de meses, esta lección vino de manos de Kim Kardashan y al parecer, aún no la aprendemos del todo.
Y sí, como dijimos anteriormente, el caso de Amber Heard es importante. ¿Por qué? Porque cualquiera de nosotras puede estar en una situación similar. No importa si somos figuras públicas o no, la violencia doméstica afecta a cualquiera y es precisamente la presión social que nos ejercemos las unas a las otras que hacen que prácticamente sea imposible combatirla.