Hubo un tiempo no tan remoto en el que el papel de la mujer en el mundo de los videojuegos estaba relegado a un plano casi marginal. Por suerte, esto es algo en lo que la sociedad ha avanzado mucho, si bien es cierto que aún queda mucho camino por recorrer.
Desde Lara Croft a la actualidad
No importa a quién se lo preguntemos. La primera mujer que se nos viene a la mente como protagonista de un videojuego es Lara Croft, santo y seña de ‘Tomb Raider’. Una saga de videojuegos que, en el momento de escribir este artículo, está compuesta por 37 títulos. Aproximadamente, uno por año desde que apareciese en el mercado el primero allá por 1996. Tampoco podemos olvidar que fue llevada al cine y que la actriz elegida para el papel fue la carismática Angelina Jolie.
Actualmente, encontrar a una mujer protagonista de un videojuego no es tan raro. De hecho, se nos vienen a la mente Nilin (‘Remember Me’) o Max y Chloe (‘Life is Strange’) como grandes producciones con millones de copias vendidas en todo el mundo en las que el jugador tenía que ponerse en la piel de una joven.
Delante y detrás de los videojuegos
Es evidente que, hoy en día, la mujer ha perdido el miedo a liderar proyectos de videojuegos, al igual que lo ha hecho a la hora de disfrutar de la emoción en ruleta casino online. No olvidemos que ellas disfrutan tanto o más que los hombres de los juegos de azar a través de sus dispositivos móviles y ordenadores, tal y como revelan los datos.
En cualquier caso, una mujer que creemos conveniente destacar es, sin duda, Laurix. Este es el pseudónimo de la primera mujer de habla hispano que ha logrado convertirse en jugadora profesional de ‘FIFA’, un juego que a partir de ahora pasará a denominarse ‘EA Sports FC’. Tradicionalmente, tanto el fútbol como los videojuegos eran cosa de hombre, pero está claro que ya no es así.
Por su parte, la presencia de la mujer dentro de la industria también ha crecido notablemente a lo largo de los años. Por ejemplo, según recientes estudios, el 23 % de las profesionales del sector participan activamente en el área de producción, mientras que el restante 16 % se dedica al diseño de arte y a la animación. Todavía son pocas, pero su trabajo se deja ver cada vez que encendemos la videoconsola o el ordenador.
Es cierto que casi el 50 % de las mujeres que llegan a estudiar en la universidad eligen carreras tecnológicas o científicas. Sin embargo, apenas una de cada cuatro acaba optando por una ingeniería, que es la profesión más demandada en el sector de los videojuegos. Esto, unido a los estereotipos que aún pesan sobre la industria, probablemente es el principal motivo por el que su presencia no es mayor.
Lo que está claro es que las tornas están cambiando y que, de seguir la progresión, en un futuro no tan lejano veremos cómo los hombres y las mujeres juegan y trabajan por igual en videojuegos.