Y ahora… ¿Qué sucederá con Melania Trump?

Cuando Donald Trump durante su campaña anunció que revocaría las leyes aprobadas por Barack Obama acerca de la maternidad planeada, la migración y la economía, la polémica llegó a niveles inimaginables. No solo se ganó el repudio de simpatizantes demócratas -y algunos republicanos-, sino que también de diversos grupos de personas alrededor del mundo, incluidos los mexicanos.

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Tal polémica se hizo más grande cuando salieron a la luz algunos de los comentarios más misóginos hechos por una figura pública. Lo que resultó sorprendente es que dos de las mujeres importantes en su vida salieron a su defensa: hablamos de su hija Ivanka y Melania, quien ahora es la Primera Dama de los Estados Unidos.

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Por una parte, Ivanka se vio envuelta en un boycott por parte de los estadounidenses que consumen los productos de su línea de ropa y accesorios. Sin embargo, Melania Trump es quien se ha llevado la peor parte.

Y es precisamente la Primera Dama de los Estados Unidos, quien se ha convertido en polémica actualmente, y no precisamente por las decisiones que comete su marido. Resulta que, en los días recientes han comenzado a circular algunos vídeos e imágenes en los que vemos a una Melania Trump prácticamente infeliz.

Y no solo eso, incluso gifs que hacen referencia a la misteriosa caja de Tiffany & Co., que le regaló a Michelle Obama durante la investidura de Donald Trump. En estos, podemos ver a modo de montaje el supuesto contenido de la caja: un letrero con la leyenda “Help Me” -ayúdame-.

El asunto fue tal, que durante la Women’s March efectuada el pasado 21 de enero, se podían leer carteles que decían: “Melania, si quieres que te rescatemos parpadea dos veces”. Además, se popularizó en redes sociales el hastag #FREEMELANIA -Libertad a Melania-.

La pregunta que diversos medios se han planteado es: ¿Merece Melania Trump nuestra compasión? O al menos así lo plantean The New York Times o Vanity Fair México -que este mes la colocó en su portada provocando el enojo de sus lectores-.

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Las opiniones están divididas: algunos dicen que el provocar compasión es una estrategia para ganarse a los ciudadanos de los Estados Unidos. Esto argumentando que en diversas ocasiones manifestó su acuerdo con las opiniones de su marido e incluso defendió algunas de sus teorías más incoherentes -como aquella que aseguraba que Obama no era estadounidense-.

Los segundos afirman que Melania se encuentra relativamente en contra de su voluntad, al menos en aquel circo mediático y político que rodea la presidencia de Donald Trump.

Lo mismo sucede en redes sociales: o sienten repudio o sienten compasión por ella. Pero, ¿Realmente es necesario esto? ¿Logrará Melania Trump ganarse la simpatía de la gente? ¿Qué sucederá ahora? ¿Obtendrá Melania el mismo respeto que sus predecesoras?

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